Llegando a Rusia

Me llevo al parecer a un bosque, estaba todo oscuro y habia muchisimos arboles alrededor, me sentia completamente confundida. No sabia que hacer ni que decir, esto era llegar muy lejos, pero yo lo habia aceptado asi que ahora me tenia que aguantar.

Lo mire perpleja sin decirle nada.

La mirada de Vi estaba distante y parecía aturdida. No era para menos, después de todo lo que habíamos pasado....

- Vi, cómo te sientes- le pregunté- ya pasaron los mareos?

Tenía muchas dudas e inquietudes. La senté bajo la sombra de un árbol y me uní a ella.

- Vi, desde cuando te has sentido así- la urgí con mis dudas.

-Estoy mejor gracias- se sento a mi lado y recargue mi cabeza en su hombro, esos "sintomas" ya habian estado ahi desde hacia varios dias pero no les habia prestado atencion los ligue a la presion que sufria ultimamente.

-Hace algunos dias- lo mire... no sabia que pasaria ahora..

Me llevé las manos a la cabeza y comencé a pensar. Había mucha información en mi cabeza y sentía que iba a explotar.

- Bueno, esto estaba en nuestros planes, aunque de forma diferente.- le sonreí.- Creo que habrá que apresurar la boda. Tu madre y tu hermano me matarán...

-No te preocupes que yo me encargo de ellos, no le haran nada a una embarazada- suspire ante mis palabras, si lo habiamos planeado pero no de esa forma, todo habia sido tan repentino.

-Hay que hacerlo rapido, no estoy segura de cuanto tarde en estar completamete listo para nacer, es algo que no se habia visto en siglos- le dije llevandome las manos al vientre instintivamente. La primera vez habia sido un susto ahora no lo era.

Vi como se replegaba contra su vientre y no pude evitar recordar a Mía. Vitya estaba al tanto de la situación y eso era incómodo. Sin embargo, en cierto modo me sentí aliviado al saber que al menos podría disfrutar del placer de ver a uno de mis hijos crecer.

- Tranquila Vi, tienes razón en eso de que no sabemos cuándo nacerá, pero quizá... debe haber algo en los registros.

La abracé con dulzura y traté de confortarla.

-No creo poder con esto... es demasiado para mi...- me acurruque en su pecho me sentia totalmente confundida, no sabia si estar feliz por la notica, si llorar por las situaciones, si preocuparme por lo que tendriamos que afrontar, ademas estaba lo de Mia... realmente yo no paraba de hacerle daño a la gente y me hacia sentir mal.

Sentí toda la conmoción de Vitya sacudirse bajo mi pecho y la apreté aún más.

- Tranquila Vi- la insté.- Yo estaré contigo. No tienes que preocuparte... Además, nos casaremos dentro de poco y todo estará bien.

La opresión de mi pecho aumento.

Si al menos tuviera la certeza de que todo saldría bien... Sin embargo estaba decidio a confiar en mi instinto y me decía que a pesar de las dificultades estaríamos bien.

Las lagrimas bajaron por mis mejillas, sabia que ninguno de los dos estaba completamente seguro de que las cosas saldrian bien, un duro panorama nos esperaba, y seria bastante duro encararlo. Pero era algo que ya habiamos elegido y que debiamos de continuar, no habia opcion de retractarse.

-Demonios- dije al ver que mis lagrimas no paraban, y aunque no me sentia debil fisica y emocionalmente, ya tenia algo que me infundiera valor.

Si, ¡demonios!

- Ven acá- le dije acomodandola en mi regazo.- Ya no llores, eso le puede hacer daño al bebé.- coloqué mi mano sobre su vientre y lo acaricié.

No había marcha atrás y ahora menos que nunca.

- Vi, no quieres al bebé?

Me acomode en su regazo y pegue mi cara a su pecho, me envolvio con sus brazos, deje de llorar.

-No es eso... solo que estoy muy sensible, ahora entiendo por que me puse asi con Niko- recordaba nuestra pequeña discusion y los cambios tan rapidos de humor que sufria.

-Por supuesto que lo quiero, es mi hijo- lo mire con reproche por esa pregunta.

- Lo siento- le dije con pena- no quería decir eso pero... tu rostro se veía tan alterado.

Recordé la conversación y era cierto. Vitya había estado muy efusiva y maternal con su hermano. Incluso había llorado de alegría al verlo de nuevo.

- supongo que eso deben er las homonas, no?

-Supongo... creo que el tenia razon al decirme que me parecia a mi madre- me escondi en su cuello, me sentia tan vulnerable. -El lado humano de las cosas

Se escondió en mi pecho y a abracé aún más.

- Shhh, Vi, no te preocupes por eso ahora, lo importante es que estés bien para que el bebé no resienta todas tus emociones.

En eso tenia razon, no podia alterarme por cosa que no eran necesarias, tenia que tener mucho cuidado por lo desconocido que era el terreno donde me encontraba, no queria que el bebe saliera lastimado de todo esto. Asi que tendria que relajarme ante todo, y dejar algunas preocupaciones.

-De acuerdo, por lo menos no creo que tengamos muchos problemas con el concilio ¿o si?- le pregunte.

- No Vi- la tranquilicé. - Por ahora tratemos de llevar esto bien y no te desesperes, de acuerdo? Sin embargo debemos tratar de apresurar los planes de la boda desde aquí. Además, no sé que tan prudente se que sepan tu estado. Aunque eso no es algo que se pueda ocultar.

No podia dejar de un lado todo lo que me preocupaba, me habian educado para anteponer los asuntos reales antes que cualquier cosa y ver por el bien de mi nacion, era dificil dejar esas costumbres ahora, pero debia hacerlo. No iba a permitir que nada le pasara a mi hijo.

-Es ciero, hay que tener los preparativos listos para cuando todo esto termine, por ahora creo que lo mas prudente sera llevar las cosas como hasta ahora... ya cuando se empieze a notar sera mejor hablar- sabia que mucha gente no lo iba a tomer bien por haberlo ocultado, entre ellos mi madre la suya, sus hermanas y tal vez Niko.

- De acuerdo. Yo mismo supervisaré todo y hablaré con mis hermanas para acelerar todo. No te preocupes, lo haré de forma sútill para que no sospechen, aunque conociendolas, no te puedo asegurar nada.

- aunque ahora, es imprescindible ir a buscar un sanador de confianza.- Recordé a Alex y el episodio con Jane y rectiqué la idea de ir yo por el anciano que nos había ayudado antes.

-Muy importante que sea discreto en todo este asunto, ademas que tenga un poco de experiencia con... bueno no solo con humanos- le dije, me preocupaban sus hermanas un poco mas Domenika por eso de que podia leer las mentes, y Mia... bueno esperaba poder hablar con ella antes de que se enterara por alguien mas, me caia realmente bien desde que la conoci, y esto me hacia sentir un tanto culpable.

- Confío plenamente en él.- afirmé. - Por mis hermanas no te preocupes- dije al ver la confusión en su rostro. sólo no pienses en ellos.

Las posibiidad de tener éxito era del 50%, al igual qué.

-De acuerdo, confio en ti- le dije, el abrupto panorama no me gustaba para nada, no eran las condiciones en las que queria traer a mi hijo al mundopero dependia de nosotros crear un mejor lugar para el o ella. -¿Cuando crees que se empieze a notar?- me preguntaba pues si era rapido tendria que ir a buscar ropa.

Sacudí la cabeza.

- No lo sé, pero por eso le diré a Alex que se apresuré. - me quedé pensando un rato y luego añadí:- Quizá dentro de un par de semanas. o menos.

Abri los ojos, mi sorpresa era demasiado, a este paso tendria a mi hijo en menos de lo esperado, mucho mucho menos.

-Crecera bastante rapido- dije, la idea de que se fuera de mi lado justo antes de tenerlo tampoco me causaba la alegri mas grande del mundo

- Probablemente. Pero no te alarmes, estaré contigo y me ocuparé de que todo salga bien.- le dije y pareció tranquilizarse.

-Bueno, al fin y al cabo tambien es tu hijo...- hize una media sonrisa, pero era la verdad, y de nosotros dependia que fuera el lider de la union de las dos razas.