Recordando Viejos Tiempos

Entré a mi habitación. Estaba confundido. De pronto había aparecido Lou y el mundo parecía trastocado.

- Lou- dije tendiendome en mi cama.

Mis ideas eran un remolino y no sabía ni por qué. Había pasado tanto tiempo...

Me quede parada a su lado sin atreverme a dar un mal paso... me sentia culpable por lo que estaba pasandoo....

-Sebastien yo... solo queria saber si eran ciertos los rumores... ya que me parecia muy "feo" quedarme cn tus recuerdos si... si... ibas Casarte...- baje mi mirada triste pero en parte apenada

-Pasa- le indiqué y cerré la puerta. Era una conversación seria y necesitaba aclarar unas cosas con ella.

Veía la tristeza reflejada en sus ojos y lo último que quería era lastimarla más. Por años la había creído desaparecida y que me odiaba. Me culpaba a mi mismo por su huída y más por haberla amado como lo había hecho.

Había fingido con éxito que no la conocía, pero me resultaba más fácil creer la mentira que aceptar la realidad.

Me la quedé mirando fijamente y la abracé sin saber bien qué decir.

- Te extrañé tanto- dije hundiendome en su sedosa cabellera.- Lamento todo lo que te dije y te hice pasar frente a todos, pero parecía como si hubiera aparecido un fantasma, hacía más de 15 años que no te veía ni tenia noticias tuyas. Pensé que me odiabas.

La apreté más fuerte en espera de su reacción y me desconsoló la idea de que sufriera por mi culpa.

Louise lloraba y me dolía verla así. Sin embargo me conmocionó más cuánto me había extrañado, pues durante años había tratado de borrar su presencia al sentirme abandonado.

- Lou- repliqué al escuchar lo de las cartas- preciosa, te juro que no recibí ni una sola noticia tuya. - Tomé su rostro entre mis manos y agregué.

- Ninguna. Todo este tiempo creí que de verda me odiabas.

- Lou, preciosa, te juro que no recibí ni una sola noticia tuya. Ninguna. Todo este tiempo creí que de verda me odiabas.- Tomo mi rostro entre sus manos, yo me limite a pasar las llemas de mis dedos por su mejilla....- -porque?- solloce - yo.. escribi esas cartas... y las envie... lo recordo perfectamente... siempre... siempre lo hacia... como pudiste creer que te odiaba... despues de todo el amor que te di...- mis dedos no bajaron de su mejilla pero mi mirada bajo apenada

Lou bajo la mirada y eso me inquietó.

- No Lou, no bajes la mirada. Te juro que no recibí ninguna carta tuya y...- apreté mis puños. Lou todo hubiera sido tan diferente....

- No llores más hermosa.

Limpié el resto de sus lágrimas y sonreí.